Para olvidarme de ti
voy a cultivar la tierra
en ella espero encontrar
remedio para mis penas.
Aquí plantaré el rosal
de las espinas más gruesas,
tendré lista la corona
para cuando en mí te mueras.
Para mi tristeza violeta azul,
clavelina roja pa' mi pasión
y para saber si me correspondes
deshojé un blanco manzanillón.
Si me quiere mucho, poquito, nada,
tranquilo queda mi corazón.
Cogollo de toronjil
cuando me aumenten las penas
las flores de mi jardín
han de ser mis enfermeras.
Y si acaso yo me ausento
antes de que te arrepientas
me dejarás estas flores
ven a curarme con ellas.
José A. Morales
No sé qué pasa contigo
no sé qué te está pasando
que a veces me quieres mucho
y a veces me estás odiando
y que por estar jugando
con el fuego del amor
sin saber cómo ni cuando (bis)
se te incendia el corazón.
Y cuando ya estés ardiendo
con el fuego del querer
no vas a encontrar mujer
en que te apague el incendio.
Porque debes tú saber
que quien le juega al azar,
lleva muchas de perder (bis)
y muy pocas de ganar.
María Greever
Todos dicen que es mentira que te quiero
porque nunca me habían visto enamorado
yo te juro que yo mismo no comprendo
el porqué de tu mirar me ha fascinado.
Cuando estoy cerca de ti
yo estoy contento
no quisiera que de nadie te acordaras
tengo celos hasta del pensamiento
que pueda recordarme
a otra persona amada.
Júrame, que aunque pase mucho tiempo
no olvidarás el momento
en que yo te conocí.
Júrame, que no hay nada más profundo
ni más grande en este mundo
que el cariño que te di.
Bésame, con un beso enamorado
como nadie me ha besado
desde el día en que nací.
Quiéreme, quiéreme hasta la locura
y así sabrás la amargura
que estoy sufriendo por ti.